¿Quién ha intoxicado a esos jóvenes, quién les ha dado el ejemplo de la violencia, quién los ha sumido en la desesperación y, sobre todo, quién les ha armado? Criminales, sí, pero acaso no son también en parte víctimas, aunque este término resulte chocante. Continuar leyendo «Atentados de Bruselas: ¡no, señor primer ministro!»